Los Picos de Europa son una impresionante cordillera montañosa que abarca tres provincias del norte de España: León, Asturias y Cantabria. Este macizo de piedra caliza, de un color y aspecto inconfundibles, es una joya natural que atrae a amantes de la naturaleza, senderistas y viajeros en busca de paisajes únicos. Dentro de Cantabria, los Picos de Europa ofrecen un punto de acceso privilegiado para explorar su riqueza natural y cultural.
Los Picos de Europa no solo destacan por su imponente geografía, sino también por su increíble diversidad de flora y fauna. Aquí conviven especies como el oso pardo cantábrico, el rebeco y el urogallo, además de una variedad de aves rapaces como el águila real. En cuanto a la flora, los bosques de hayas, robles y acebos cubren gran parte del territorio, creando un entorno ideal para la vida silvestre. Este espacio natural está protegido dentro del Parque Nacional de los Picos de Europa, uno de los más antiguos de España, declarado en 1918, y considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Los Picos de Europa se estructuran en tres macizos bien diferenciados, cada uno con características propias:
Macizo Occidental o del Cornión: Este macizo es conocido por albergar el Santuario de Covadonga y los famosos lagos Enol y Ercina. Su perfil es más redondeado, con amplias praderas de montaña y formaciones rocosas espectaculares.
Macizo Central o de Los Urrieles: Es el más alto y abrupto de los tres. Aquí se encuentran las cumbres más elevadas, como el Llambrión (2642 m), Peña Vieja (2613 m) y el emblemático Naranjo de Bulnes o Pico Urriello (2519 m). Este último es un icono del montañismo en España y un desafío para los escaladores de todo el mundo. En este macizo también se encuentra la Torre Cerredo, que, con sus 2648 metros, es la cumbre más alta de los Picos de Europa.
Macizo Oriental o de Ándara: Aunque menos visitado, este macizo ofrece rutas menos transitadas, perfectas para quienes buscan tranquilidad y contacto directo con la naturaleza. Su geología está marcada por antiguas minas de zinc, que forman parte del patrimonio industrial de la región.
Los ríos son elementos clave en la configuración de los Picos de Europa, ya que han moldeado este paisaje único durante millones de años. Entre los más destacados se encuentran:
Una de las particularidades de los Picos es que, en días despejados, sus majestuosas cumbres son perfectamente visibles desde la costa cántabra. Esto crea un contraste único: desde las playas y acantilados del Cantábrico se puede admirar este imponente telón de fondo montañoso. Cantabria, además, ofrece varios accesos a los Picos de Europa, siendo la localidad de Potes y el Valle de Liébana dos de los más destacados. Aquí, los visitantes pueden explorar no solo el paisaje natural, sino también la rica historia, cultura y gastronomía de la región.
Si visitas Cantabria y los Picos de Europa, no te faltarán actividades:
Los Picos de Europa son mucho más que un destino natural; son un lugar donde la majestuosidad de las montañas, la riqueza de su biodiversidad y la herencia cultural de la región se entrelazan para ofrecer una experiencia única. Desde Cantabria, este parque nacional se presenta como una puerta de entrada inigualable para descubrir uno de los espacios más emblemáticos de España. ¡No te pierdas la oportunidad de explorar este tesoro natural!